miércoles, 19 de abril de 2017

ENSEÑANZAS


Tema 4: La Tierra y la Monarquía.
Josué cumplió la promesa de Dios y podemos ver que si estamos con Dios no nos falta nada. Debemos de ser fieles a la palabra de Dios para que todo marche bien. Y aunque existían personas que intentaban alejarlos de la fe verdadera pero ellos se mantuvieron firmes y obedecieron el mandato de Dios y por eso mismo Dios los cubrió y los respaldó.
A los cananeos les gustaba construir templos, vivir en casas cómodas de ladrillo y a los israelitas les gustó la idea de ellos. Poco a poco los israelitas se fueron olvidando de la promesa que le habían hecho a Dios y por eso permitía que ellos cayeran. En un momento Dios se apiadó de ellos y les envió jueces para que rescataran a Israel de sus enemigos pro cuando ya estaban a salvo se olvidaban nuevamente de Dios y volvían a caer.
El pueblo de Israel era distinto a las demás naciones, porque eran gobernadas por Dios, pero los israelitas en sus malos actos decidieron tener gobierno y rey, que era totalmente contrario a lo que Dios quería. Dios hizo todo lo posible para que ese pueblo se acercara más a él, hasta decidió obedecer o escuchar las peticiones de ese pueblo. Los ancianos le pidieron a Samuel un rey o alguien que los gobernara. Samuel habló con Dios y envió a Saúl, al pasar el tiempo a David y por último a Salomón. Tres grandes reyes con sus buenas y malas características.

Moisés murió a la edad de 120 años y dejó como encargado de Israel a Josué quien sería el que iba a dirigir la conquista de Canaán. A pesar de que Israel pecaba y le era infiel a Dios, lograron librarse de sus enemigos los cananeos quienes querían alejarlos de la fe verdadera y que adoraran ídolos. Dios estuvo con ellos todo el tiempo a pesar de que ellos fallaron mucho, porque Dios quería que lo adoraran solo a él, pero los israelitas en muchas veces fueron débiles con su fe y caían. Por eso Dios les enviaba pruebas para que ellos se acercaran más a él pero estaban con él un tiempo y después caían.

Tema 5: Vocación profética
Cuando hablamos de vocación profética no nos referimos sólo al pueblo de Israel, sino que se puede dar cierto profetismo en Egipto y Asiria Antigua, exactamente en Mesopotamia. Pero éstos no son más que una combinación de magia, adivinación y religión.
Profeta del griego pro-phetes que significa “ser portavoz de” o también se puede usar como nabí que es lo mismo. Existen muchos tipos de profetas pero ¿Cómo distinguir un profeta verdadero de uno falso? Al profeta verdadero se le cumplen las profecías pero al falso no. También los falsos profetas anuncian la salvación según les convenga a ellos. Otra característica para distinguir los verdaderos profetas es que ellos son leales a Dios pero los falsos profetas adoran otros dioses. Según una tradición judía después de la muerte de Zacarías o Malaquías.

El profetismo en Egipto era cuando el gobernante le consultaba a un personaje y el predecía cosas del futuro, lo mismo pasaba en Asiria. Pero éstos lo hacían por magia, adivinación y religión.
Un nabí es alguien que manifiesta elementos en el que presenta una unión por medio de la contemplación. Es el que predica o quien intercede entre Dios y el pueblo.
Existen diferentes tipos de profetas, por ejemplo; Los mayores: Isaías, Jeremías y Ezequiel; Los menores: Oseas, Joel, Amós y otros. También están los profetas no escritores: Gad, Oded y más.

Tema 6: El sufrimiento del destierro.
Fue por el orgullo y la idolatría de Salomón que Israel llegó a su punto culminante. Cuando Salomón murió, su hijo Roboam estaba preparado para seguir con el reinado pero éste no conocía más que el lujo y la ociosidad.
El pueblo había sufrido mucho durante el reinado de Salomón y cunado Roboam tomó el puesto de Rey nos ancianos junto a Jeroboam que era el que tenía un cargo alto durante el reinado de Salomón, le dijeron a Roboam que les quitara un poco de peso del que llevaban en sus hombros pero Roboam les dijo que regresaran a los tres días, que él les tendría la respuesta y Roboam pidió consejos pero no escuchó lo que él quería. Y cuando los ancianos regresaron les dijo que si su padre había sido duro con ellos él sería peor. Las tribus del norte se revelaron y eligieron como rey a Jeroboam, pero el Sur, Judá y la tribu de Benjamín permanecieron fieles y siempre fueron gobernados por Roboam. 



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